Si tuviera que elegir una foto que resuma este 2018, sería ésta.
Si, unos percebes. Tomada en agosto en la Playa de las Catedrales de Lugo.
Para mi no son sólo unos percebes, simbolizan el verano en el que concebí a Elia y en cuyo camino a ese destino supe que lo hice con éxito. También simboliza el intento de arrancar la espinita gallega que tenía desde hacía 9 años,que aunque me supo a poco y no pude disfrutarlo del todo, al menos lo intenté.
A veces los sueños se solapan, no son compatibles y hay que priorizar unos abandonando otros...
